Vivimos en medio de fuerzas invisibles de las que percibimos únicamente sus efectos. Nos movemos entre formas invisibles cuyas acciones muy a menudo no percibimos en absoluto, aunque podamos ser afectados muy profundamente por ellas.
En este lado mental de la naturaleza, invisible a nuestros sentidos, intangible a nuestros instrumentos de precisión, pueden ocurrir muchas cosas que no están sin su eco en el plano físico. Hay seres que viven en este mundo invisible como peces en el agua. Hay hombres y mujeres con mentes entrenadas, o aptitudes especiales, que pueden entrar en este mundo invisible como un buzo desciende al lecho del océano. Hay también tiempos en los que, como le ocurre a una tierra cuando los diques marinos se rompen, las fuerzas invisibles fluyen sobre nosotros y empantanan nuestras vidas.
Dion Fortune
Autodefensa Psíquica