A DELMIRA AGUSTINI
«Yo muero extrañamente…No me mata la vida, no me mata la muerte, no me mata el amor. Muero de un pensamiento mudo como una herida»…
(D. A)
La Nena, un estallido.
Mujer, enigma, certeza…
¿Qué mala estrella se aposentó en tu frente
ataviando de riguroso luto tu destino?
Delmira, descansa en paz.
Salva ese sueño demasiado para la compañía
y breve para la soledad,
en el ningún olvido de tus ojos.
Quizás pueda la noche corporizar la falta
en el deslave de tu cuerpo,
y hacer de cada llanto esa savia eficaz
que te circule el sueño y lo sostenga.
De morir te veo acariciando el sueño
en el vivir,
poeta, enigma, certeza.
Martha Jacqueline Iglesias Herrera
(A veces asusta el corazón de una mujer. El dolorido afán que brota de su entraña es un ardor sellándose en el alma; fuego de goce, delirio que no calma, desmedido en el acto de existir).
👉Delmira Agustini Murtfeldt: (Montevideo, 24 de octubre de 1886- 6 de julio de 1914) fue una poeta uruguaya.
Con una fuerte carga erótica, sus poemas siguen la línea modernista y están llenos de feminismo, simbolismo, sensualidad y sexo. El alma de Agustini, «sin filtros ni condicionamientos», queda patente en el poemario Los cálices vacíos. La obra es, además, una invitación a desandar el camino que la condujo a su yo.