Me he vestido esta noche con letras de tu nombre,
y te llevo prendido del mirar al abrigo…
tengo gusto a septiembre, a promesa, a latido,
a la hora que queda parada en los relojes.
Me he entallado en el pecho la caricia de un vuelo
que surcó de rebelde por tu cielo encantado
he bebido del fuego oficial del pecado
al fraguar en tus labios el contacto de un beso.
Y no sé de la usura que acompaña este tiempo
en la esquina de un viernes que parece ser santo.
Me arrodillo devota con los ojos abiertos
cómplice de un ardor que a mí me supo a sábado.
MARTHA JACQUELINE IGLESIAS HERRERA
DEL POEMARIO: «EMBRUJO DE VISIÓN» (2022)