Ya no muero de muerte, ya no muero.
Muero de un poco yo,
de un poco tú, y tanto fuego…
de mis palabras sucias de amor en el deseo,
de este recato de monja que apenas me perdura
de abrazar esa noche cuando dices «mi luna»
y de mirar pasar la vida que nos queda.
Muero de todo eso que parece distante,
de lágrima, de risa, de este toque de queda,
de parecer sencilla como una violeta
muero de la viudez tan triste de la hambruna.
Ya no muero de muerte, ya no muero,
muero de un poco tú, de un poco yo…
y tanto fuego.
Martha Jacqueline Iglesias Herrera
DEL POEMARIO: «EMBRUJO DE VISIÓN»
Poema ilustrado con la obra de la pintora polaca: Lidia Wylangowska