a Esteban…
Despierto junto a ti en un mundo de ensueño…
donde la magia de nuestra noche gira sobre sus goznes
para abrirle las puertas a la luna,
donde eres Ángel que lleva prendido en la mirada
el vaticinio que consulto –divina- como el oráculo de Delfos,
donde mi pensamiento se viste en traje de ritual:
-esa fauna de visiones que cazo como guerrera en tierra de conquista-.
Y aquí estás,
con el ánimo alerta por destrozar los límites marcados
por Dios y por los hombres,
sentado en el sitial de mi alma que es cantera
para que el corazón construya sus latidos,
traspasando las fronteras entre mundos
mientras proyectas un nuevo pacto y curso a mi destino.
Vestida estoy de ti,
hechicero del alma con el destral a punto
para encauzar los ritos secretos de la sangre,
depositario de una visión tan honda como estrella en el cielo,
guardián de esa profecía en bruto
que yace en el caldero de la predicción y revelas con tu fuego.
Y aquí estoy,
todavía desvelada como estatua de gracia al contacto de tu beso,
entallándome tus palabras en la vocación invicta de mis manos,
convocando la alianza de tu nombre
como poder celeste que exorciza del tiempo,
su misterio.
Despierto junto a ti en un mundo de ensueño, amor.
Martha Jacqueline Iglesias Herrera
DEL POEMARIO: «RITUAL DE LO INVISIBLE»